Entre las cosas que nos traerá el 2015 está el nuevo disco de Rihanna, “R8”. La de Barbados se encuentra ya rematando los últimos detalles del que será su octavo trabajo y, por eso, se dejó ver la pasada noche por París. Como recién llegada de otro planeta, con un mono gris metalizado, unos guantes, unas zapatillas de deporte, un peinado un tanto imposible y una impresionante gargantilla de diamantes al cuello, fue como apareció la joven ante la Torre Eiffel de París para realizar un shooting de lo más multitudinario.
Como era de esperar, sus fans franceses no quisieron desaprovechar la ocasión de poder ver a su ídolo a tan solo unos metros de distancia, y fueron muchos los que se acercaron hasta los Jardines de Trocadero para poder ver a Rihanna en vivo y en directo. Por supuesto, todos y cada uno de ellos llegaron armados con cámaras de fotos y teléfonos inteligentes para poder inmortalizar ese momento. Durante toda la sesión, la multitud allí concentrada no paró de chillar el nombre de la estrella de la canción.
Rihanna, a la que vimos derrochar elegancia en el Annual Diamond Ball, estaba feliz de sentir el cariño de los franceses y no dudo en acercarse a ellos lo máximo que pudo. Tanto revuelo organizó, que al final tuvo que subirse a hombros de sus guardaespaldas para poder salir de allí. Sin embargo, la joven no perdió la sonrisa en ningún momento y se la vio encantada de estar allí. No nos cabe duda de que la cantante está atravesando uno de sus mejores momentos, pues hace tan solo unos días, conocíamos la noticia de que será la próxima directora creativa de la marca deportiva Puma.